En México se ha logrado controlar el aumento de los casos de VIH/Sida, al registrar una prevalencia de 0.38 por ciento, aunado a ello, todas las personas que viven con VIH tienen garantizado su tratamiento de forma gratuita.
Actualmente la Secretaría de Salud (SSA) otorga 44 mil tratamientos, mientras que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado ISSSTE brindan otros 30 mil, lo que se traduce en una inversión anual de más de dos mil millones de pesos.
Asimismo, se cuenta con 66 Centros Ambulatorios para la Prevención y Atención del VIH/Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual (CAPASITS), en todo el país y seis más están en proceso de operación.
Esto de acuerdo con un comunicado de prensa emitido por la SSA, en donde se detalló que se ha eliminado la transmisión de la enfermedad por vía transfusional y reducido la transmisión vertical, es decir, de madre a hijo.
En respecto con los resultados que arrojan las encuestas realizadas al respecto señalan que en la actualidad el 70 por ciento de las mujeres embarazadas que se atienden en las instituciones médicas de la Secretaría de Salud, se realizan la prueba de detección.
De igual forma se suministra el medicamento antirretroviral denominado "Atripla", que contiene tres medicamentos en una sola pastilla, lo que permite tener mayor adherencia terapéutica.
Todas estas medidas han permitido disminuir la moralidad de manera contundente particularmente en estos tres últimos años, al pasar del siete por ciento en 2008 a tres punto dos por ciento durante el 2010.
Es así como en la actualidad esta enfermedad se considera como cualquier otro padecimiento crónico, ya que se controla de forma efectiva con medicamentos, lo que permite a la persona llevar una vida prácticamente normal.
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martes, 13 de septiembre de 2011
¿QUE TANTO SABES DEL VIH/SIDA?
"El que tiene VIH tiene SIDA"... "Solamente se contagian los homosexuales"... o peor, "Es una sentencia de muerte"... son algunas de las falsas nociones en torno al Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). Quiero ayudarte a aclarar ciertas dudas porque lo que sabes – o lo que ignoras- puede hacer la diferencia entre llevar una vida larga y saludable, o contraer una enfermedad incurable con consecuencias fatales. ¡Infórmate bien!
¡Alerta amiga! Hay miles de personas en peligro de contraer VIH y entre ellas puedes estar tú, un amigo entrañable, alguien en tu familia. Las estadísticas no mienten: cada año más de 1 millón de personas lo contraen en Estados Unidos solamente. Lo peor es que 1 de cada 5 de esas personas no sabe que está infectada hasta que es tarde. Muchos de los que se creen "invulnerables" ignoran que el 1% de los casos nuevos que se reportan se deben al contacto entre heterosexuales que no usaron la protección debida. Es el momento de abrir los ojos ¡y bien abiertos!
1. ¿Sabes qué es el VIH? Muchos creen que es lo mismo que el SIDA, pero no lo es. El virus de inmunodeficiencia humana ataca y destruye a las células CD4 del sistema inmunológico (o de defensa) del organismo. Estas células son las que se encargan de combatir a varias de las enfermedades que nos afectan. Con el tratamiento adecuado, los que contraen el VIH pueden vivir muchos años e incluso décadas sin que el virus se convierta en SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida). Para que esto suceda la persona tiene que desarrollar cierto tipo de infecciones y su cuenta de las células CD4 debe disminuir por debajo de los 200. El SIDA es la etapa más avanzada de la infección, cuando el sistema inmunológico está tan dañado que no puede combatir eficazmente las infecciones y algunos tipos de cáncer.
2. Ten muy claro cómo es que puedes contagiarte. No vas a adquirir VIH si tocas a una persona afectada, ni siquiera si beben del mismo vaso o comparten la ropa o una toalla. Desde que en los Estados Unidos se están tomando precauciones rigurosas con la sangre donada, el contagio por esta vía, que fue muy común hace unos años, ya se ha eliminado. Ahora bien, ten mucho cuidado con las relaciones sexuales sin precaución (sin usar correctamente un condón con personas infectadas, y muchas veces es difícil saber si tu pareja está infectada o no), hay riesgo al compartir agujas para el consumo de drogas, o al hacerse tatuajes con instrumental infectado. Estos son los mayores riesgos de contagio.
3. El VIH es una condena a vivir poco. Falso, adquirir VIH no es cosa de juego, pero si se sigue un tratamiento adecuado a tiempo es posible mantenerlo bajo control por muchos años. Desde luego, cada persona es diferente y algunas desarrollan SIDA poco tiempo después de contagiarse con el VIH porque su sistema inmunológico se deteriora rápidamente. Por eso la prevención es tan importante.
4. ¿Cuáles son los síntomas? ¿Cómo se sabe que se ha adquirido el VIH? Hay personas que portan el virus durante años sin mostrar síntomas (y en ese tiempo puede contagiar sin ni siquiera imaginárselo a otras personas). Otras pueden demostrar síntomas a los pocos días o semanas después de contagiarse. Los síntomas son parecidos a los de la gripe o la mononeucleosis: dolor de garganta, fatiga, fiebre y erupciones en la piel. Al desaparecer al poco tiempo, la persona no se preocupa demasiado y el peligroso ciclo continúa, para ella y para los que la rodean. Si se piensa que se pudo haber estado expuesto, se tienen varias parejas sexuales, se practica el sexo sin protección o se usan agujas para consumir drogas, la única forma de estar seguro es hacerse la prueba del VIH.
5. ¿Tiene cura? No, no tiene cura, pero sí tratamiento. Los medicamentos para tratar el VIH funcionan de diferentes formas: unos impiden que el virus se multiplique y se propague; otros evitan que el virus inserte su material genético en las células del sistema inmunológico. En cuanto la persona compruebe que ha adquirido el VIH, debe acudir al médico de inmediato para que éste establezca la mejor estrategia de tratamiento según la condición general de la persona y el estado de su sistema de defensa.
6. Si la pareja también tiene VIH ¿no hay que protegerse durante la relación sexual? Ni lo creas. Aunque ambas personas tengan VIH hay que seguirse protegiendo. El uso del condón protege a ambos de otras enfermedades transmitidas sexualmente, así como de otras cepas de VIH que puedan ser resistentes a los medicamentos anti-VIH que toman. Se puede infectar a otros aunque se esté bajo tratamiento.
7. ¿Una embarazada infectada puede contagiar a su criatura? Desafortunadamente, sí. El bebé puede contagiarse durante el embarazo o el parto. Hay que ponerse de inmediato bajo tratamiento para reducir el riesgo de contagio para el bebé.
8. ¿Qué protección brinda el tratamiento? Las personas con VIH tienen un sistema inmunológico más débil y por eso están en mayor riesgo de contagiarse con neumonía, tuberculosis, toxoplasmosis y otras infecciones. La mejor manera de reducir el riesgo de infección es tomando los medicamentos y evitar comer carne que no está bien cocinada, evitar tocar las cajitas de arena para los gatos y evitar beber agua que pueda estar contaminada.
Los tratamientos para el VIH disponibles hoy se han ido perfeccionando a través del tiempo y son mucho menos tóxicos y más fáciles de tolerar que en el pasado. La enfermedad sigue siendo un enorme reto para la salud del paciente, pero es posible mantenerla bajo control con un estilo de vida saludable y siguiendo disciplinadamente la terapia indicada por el especialista.
¡Alerta amiga! Hay miles de personas en peligro de contraer VIH y entre ellas puedes estar tú, un amigo entrañable, alguien en tu familia. Las estadísticas no mienten: cada año más de 1 millón de personas lo contraen en Estados Unidos solamente. Lo peor es que 1 de cada 5 de esas personas no sabe que está infectada hasta que es tarde. Muchos de los que se creen "invulnerables" ignoran que el 1% de los casos nuevos que se reportan se deben al contacto entre heterosexuales que no usaron la protección debida. Es el momento de abrir los ojos ¡y bien abiertos!
1. ¿Sabes qué es el VIH? Muchos creen que es lo mismo que el SIDA, pero no lo es. El virus de inmunodeficiencia humana ataca y destruye a las células CD4 del sistema inmunológico (o de defensa) del organismo. Estas células son las que se encargan de combatir a varias de las enfermedades que nos afectan. Con el tratamiento adecuado, los que contraen el VIH pueden vivir muchos años e incluso décadas sin que el virus se convierta en SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida). Para que esto suceda la persona tiene que desarrollar cierto tipo de infecciones y su cuenta de las células CD4 debe disminuir por debajo de los 200. El SIDA es la etapa más avanzada de la infección, cuando el sistema inmunológico está tan dañado que no puede combatir eficazmente las infecciones y algunos tipos de cáncer.
2. Ten muy claro cómo es que puedes contagiarte. No vas a adquirir VIH si tocas a una persona afectada, ni siquiera si beben del mismo vaso o comparten la ropa o una toalla. Desde que en los Estados Unidos se están tomando precauciones rigurosas con la sangre donada, el contagio por esta vía, que fue muy común hace unos años, ya se ha eliminado. Ahora bien, ten mucho cuidado con las relaciones sexuales sin precaución (sin usar correctamente un condón con personas infectadas, y muchas veces es difícil saber si tu pareja está infectada o no), hay riesgo al compartir agujas para el consumo de drogas, o al hacerse tatuajes con instrumental infectado. Estos son los mayores riesgos de contagio.
3. El VIH es una condena a vivir poco. Falso, adquirir VIH no es cosa de juego, pero si se sigue un tratamiento adecuado a tiempo es posible mantenerlo bajo control por muchos años. Desde luego, cada persona es diferente y algunas desarrollan SIDA poco tiempo después de contagiarse con el VIH porque su sistema inmunológico se deteriora rápidamente. Por eso la prevención es tan importante.
4. ¿Cuáles son los síntomas? ¿Cómo se sabe que se ha adquirido el VIH? Hay personas que portan el virus durante años sin mostrar síntomas (y en ese tiempo puede contagiar sin ni siquiera imaginárselo a otras personas). Otras pueden demostrar síntomas a los pocos días o semanas después de contagiarse. Los síntomas son parecidos a los de la gripe o la mononeucleosis: dolor de garganta, fatiga, fiebre y erupciones en la piel. Al desaparecer al poco tiempo, la persona no se preocupa demasiado y el peligroso ciclo continúa, para ella y para los que la rodean. Si se piensa que se pudo haber estado expuesto, se tienen varias parejas sexuales, se practica el sexo sin protección o se usan agujas para consumir drogas, la única forma de estar seguro es hacerse la prueba del VIH.
5. ¿Tiene cura? No, no tiene cura, pero sí tratamiento. Los medicamentos para tratar el VIH funcionan de diferentes formas: unos impiden que el virus se multiplique y se propague; otros evitan que el virus inserte su material genético en las células del sistema inmunológico. En cuanto la persona compruebe que ha adquirido el VIH, debe acudir al médico de inmediato para que éste establezca la mejor estrategia de tratamiento según la condición general de la persona y el estado de su sistema de defensa.
6. Si la pareja también tiene VIH ¿no hay que protegerse durante la relación sexual? Ni lo creas. Aunque ambas personas tengan VIH hay que seguirse protegiendo. El uso del condón protege a ambos de otras enfermedades transmitidas sexualmente, así como de otras cepas de VIH que puedan ser resistentes a los medicamentos anti-VIH que toman. Se puede infectar a otros aunque se esté bajo tratamiento.
7. ¿Una embarazada infectada puede contagiar a su criatura? Desafortunadamente, sí. El bebé puede contagiarse durante el embarazo o el parto. Hay que ponerse de inmediato bajo tratamiento para reducir el riesgo de contagio para el bebé.
8. ¿Qué protección brinda el tratamiento? Las personas con VIH tienen un sistema inmunológico más débil y por eso están en mayor riesgo de contagiarse con neumonía, tuberculosis, toxoplasmosis y otras infecciones. La mejor manera de reducir el riesgo de infección es tomando los medicamentos y evitar comer carne que no está bien cocinada, evitar tocar las cajitas de arena para los gatos y evitar beber agua que pueda estar contaminada.
Los tratamientos para el VIH disponibles hoy se han ido perfeccionando a través del tiempo y son mucho menos tóxicos y más fáciles de tolerar que en el pasado. La enfermedad sigue siendo un enorme reto para la salud del paciente, pero es posible mantenerla bajo control con un estilo de vida saludable y siguiendo disciplinadamente la terapia indicada por el especialista.
Reprueban acciones contra programa de VIH/sida del DF
El Programa de VIH/SIDA de la Ciudad de México, se ha convertido, en tan solo tres años, en un modelo de buena práctica en la atención de este problema de salud pública que afecta a miles de personas en nuestro país.
A LA OPINIÓN PÚBLICA,
El Programa de VIH/SIDA de la Ciudad de México, se ha convertido, en tan solo tres años, en un modelo de buena práctica en la atención de este problema de salud pública que afecta a miles de personas en nuestro país. La actual dirección del Programa ha logrado organizar y desarrollar una serie de programas y servicios que han beneficiado a miles de personas con VIH, con SIDA o en riesgo de infección por el virus en esta ciudad. El equipo de servidores públicos que lo dirige no se ha limitado a proporcionar tratamiento antirretroviral y análisis clínicos de monitoreo médico a la personas usuarias de la Clínica Especializada Condesa (CEC), adscrita al Programa, sino que, siguiendo las recomendaciones internacionales, ha creado una serie de programas y servicios dirigidos a atender a las personas más expuestas y vulnerables al riesgo de infección por VIH. Por ejemplo:
» Atención a Infecciones de Transmisión Sexual en la Población de Hombres que tienen sexo con Hombres, la población más afectada por la epidemia.
» Salud Sexual y Reproductiva en Mujeres en Alta Marginación
» Programa de Atención y Control del VIH en centros penitenciarios del DF, que ha logrado abatir la mortalidad y elevar la calidad de vida de los internos con VIH.
» Prevención del VIH e infecciones de Transmisión Sexual en Personas Víctimas de Violencia.
» Centro de Atención a Personas Transgénero, único en su tipo en donde, además del tratamiento antirretroviral se proporciona tratamiento hormonal y que tiene el enorme beneficio de mantener cerca de los servicios de atención y prevención a una población particularmente vulnerable.
» Detección y diagnóstico integral de VIH. Este programa es único e innovador no sólo en nuestro país, sino a nivel internacional. Modelo que se está buscando replicar en otros lugares dentro y fuera del país.
En la Clínica Especializada Condesa, que actualmente atiende a más de 6 mil pacientes, se organizó los servicios para proveer una atención integral de calidad que permitió elevar sensiblemente la calidad de la atención; puso en orden la farmacia; ha logrado mantener el abasto ininterrumpido de los antiretrovirales a los pacientes; avanzó en la actualización de expedientes; e inició el boletín de la Clínica en el que se hace público su desempeño en términos de indicadores claros sobre sus procedimientos y rendición de cuentas. Una vez más, un modelo ejemplar con estándares internacionales.
Por el lado de prevención, el Programa de VIH/SIDA de la Ciudad inició un proceso dinámico y de vanguardia para la generación de evidencia como la implementación de un programa en el sistema penitenciario de la Ciudad de México; donde se implementó un programa de detección integral que ya ha cubierto a más de 25 mil internos y en forma paralela dio un avance espectacular en la cobertura de tratamiento, logrando en un año que el 85% de los pacientes se encuentre indetectable. En la CEC los capitalinos cuentan con un servicio de detección de VIH ágil, confiable y gratuito. El tema que se está discutiendo con mayor intensidad entre la comunidad científica y responsable de políticas públicas a nivel internacional, que es la importancia de la detección oportuna y el acceso a tratamiento antiretroviral a la mayor cantidad posible de personas con VIH, como medida preventiva eficaz para disminuir el avance de la epidemia se ha traducido en un programa concreto en la CEC que seguramente servirá como referente para otros espacios.
El Programa de VIH/Sida también ha mostrado un enorme liderazgo en la generación de conocimiento y de evidencia científica para sustentar sus acciones y la implementación de sus programas. De manera notable abrió sus puertas a investigadores de la salud y de las ciencias sociales en el campo del VIH de los Institutos Nacionales de Salud Pública, de Cancerología y de Ciencias Médicas y Nutrición; del Hospital General Manuel Gea González; de la UAM y de la UNAM; así como de reconocidas instituciones internacionales como los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos, la Fundación Bill y Melinda Gates y la Universidad de Emory en Atlanta con quienes realiza o está por iniciar proyectos de investigación clínica y social diversos. Esta red tan amplia de colaboración con el sector académico es única en nuestro contexto, a pesar de los obvios beneficios que tiene para apoyar la generación de evidencia.
Además, el Programa de VIH/SIDA ha establecido alianzas y colaboraciones con diversas organizaciones de la sociedad civil e instituciones como la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal para mejorar la calidad de la atención y garantizar el respeto a los derechos humanos de las personas con VIH usuarias de sus servicios. Desde hace más de un año funciona dentro de las instalaciones de la Clínica Especializada Condesa un Módulo de Atención en Derechos Humanos manejado de manera autónoma por una organización civil. Estos son ejemplos del carácter innovador, no solo en el ámbito de la atención médica y científica, sino en el campo de los derechos humanos que ha desarrollado el grupo al frente del Programa de VIH/SIDA y la Clínica Especializada Condesa.
Como académicos y clínicos que trabajamos en diferentes instituciones de salud y de las ciencias sociales en el área del VIH/SIDA en México, lamentamos profundamente que la dirigencia del sindicato de trabajadores, donde están afiliados los trabajadores de la CEC, tome medidas que pueden poner en riesgo un proyecto tan importante y que en última instancia afectan seriamente la salud de miles de personas. Especialmente reprobable es que se haya impedido la entrada a la clínica a la Dra. Andrea González, Coordinadora del Programa de VIH/SIDA de la Ciudad de México, al Dr. Jesús Casillas, Director de la CEC; y al Dr. Ubaldo Ramos, Subdirector médico de dicha Clínica. Estas acciones son vergonzosas y contradictorias con la misión de los trabajadores del sector salud, especialmente para una Ciudad que hasta ahora ha dado ejemplos notables de avances hacia la protección social de grupos vulnerables.
Nos pronunciamos tajantemente en contra de estas acciones coercitivas e innecesarias que no sólo vulneran y ponen en riesgo seriamente la continuidad y los excelentes logros del programa integral de control del VIH/SIDA en la ciudad de México sino que, lo más grave, ponen en riesgo la salud y la vida de miles de pacientes con VIH atendidos por dicho Programa y finalmente a todos los habitantes de esta Metrópoli al afectar los programas de prevención en la lucha contra esta epidemia.
A LA OPINIÓN PÚBLICA,
El Programa de VIH/SIDA de la Ciudad de México, se ha convertido, en tan solo tres años, en un modelo de buena práctica en la atención de este problema de salud pública que afecta a miles de personas en nuestro país. La actual dirección del Programa ha logrado organizar y desarrollar una serie de programas y servicios que han beneficiado a miles de personas con VIH, con SIDA o en riesgo de infección por el virus en esta ciudad. El equipo de servidores públicos que lo dirige no se ha limitado a proporcionar tratamiento antirretroviral y análisis clínicos de monitoreo médico a la personas usuarias de la Clínica Especializada Condesa (CEC), adscrita al Programa, sino que, siguiendo las recomendaciones internacionales, ha creado una serie de programas y servicios dirigidos a atender a las personas más expuestas y vulnerables al riesgo de infección por VIH. Por ejemplo:
» Atención a Infecciones de Transmisión Sexual en la Población de Hombres que tienen sexo con Hombres, la población más afectada por la epidemia.
» Salud Sexual y Reproductiva en Mujeres en Alta Marginación
» Programa de Atención y Control del VIH en centros penitenciarios del DF, que ha logrado abatir la mortalidad y elevar la calidad de vida de los internos con VIH.
» Prevención del VIH e infecciones de Transmisión Sexual en Personas Víctimas de Violencia.
» Centro de Atención a Personas Transgénero, único en su tipo en donde, además del tratamiento antirretroviral se proporciona tratamiento hormonal y que tiene el enorme beneficio de mantener cerca de los servicios de atención y prevención a una población particularmente vulnerable.
» Detección y diagnóstico integral de VIH. Este programa es único e innovador no sólo en nuestro país, sino a nivel internacional. Modelo que se está buscando replicar en otros lugares dentro y fuera del país.
En la Clínica Especializada Condesa, que actualmente atiende a más de 6 mil pacientes, se organizó los servicios para proveer una atención integral de calidad que permitió elevar sensiblemente la calidad de la atención; puso en orden la farmacia; ha logrado mantener el abasto ininterrumpido de los antiretrovirales a los pacientes; avanzó en la actualización de expedientes; e inició el boletín de la Clínica en el que se hace público su desempeño en términos de indicadores claros sobre sus procedimientos y rendición de cuentas. Una vez más, un modelo ejemplar con estándares internacionales.
Por el lado de prevención, el Programa de VIH/SIDA de la Ciudad inició un proceso dinámico y de vanguardia para la generación de evidencia como la implementación de un programa en el sistema penitenciario de la Ciudad de México; donde se implementó un programa de detección integral que ya ha cubierto a más de 25 mil internos y en forma paralela dio un avance espectacular en la cobertura de tratamiento, logrando en un año que el 85% de los pacientes se encuentre indetectable. En la CEC los capitalinos cuentan con un servicio de detección de VIH ágil, confiable y gratuito. El tema que se está discutiendo con mayor intensidad entre la comunidad científica y responsable de políticas públicas a nivel internacional, que es la importancia de la detección oportuna y el acceso a tratamiento antiretroviral a la mayor cantidad posible de personas con VIH, como medida preventiva eficaz para disminuir el avance de la epidemia se ha traducido en un programa concreto en la CEC que seguramente servirá como referente para otros espacios.
El Programa de VIH/Sida también ha mostrado un enorme liderazgo en la generación de conocimiento y de evidencia científica para sustentar sus acciones y la implementación de sus programas. De manera notable abrió sus puertas a investigadores de la salud y de las ciencias sociales en el campo del VIH de los Institutos Nacionales de Salud Pública, de Cancerología y de Ciencias Médicas y Nutrición; del Hospital General Manuel Gea González; de la UAM y de la UNAM; así como de reconocidas instituciones internacionales como los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos, la Fundación Bill y Melinda Gates y la Universidad de Emory en Atlanta con quienes realiza o está por iniciar proyectos de investigación clínica y social diversos. Esta red tan amplia de colaboración con el sector académico es única en nuestro contexto, a pesar de los obvios beneficios que tiene para apoyar la generación de evidencia.
Además, el Programa de VIH/SIDA ha establecido alianzas y colaboraciones con diversas organizaciones de la sociedad civil e instituciones como la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal para mejorar la calidad de la atención y garantizar el respeto a los derechos humanos de las personas con VIH usuarias de sus servicios. Desde hace más de un año funciona dentro de las instalaciones de la Clínica Especializada Condesa un Módulo de Atención en Derechos Humanos manejado de manera autónoma por una organización civil. Estos son ejemplos del carácter innovador, no solo en el ámbito de la atención médica y científica, sino en el campo de los derechos humanos que ha desarrollado el grupo al frente del Programa de VIH/SIDA y la Clínica Especializada Condesa.
Como académicos y clínicos que trabajamos en diferentes instituciones de salud y de las ciencias sociales en el área del VIH/SIDA en México, lamentamos profundamente que la dirigencia del sindicato de trabajadores, donde están afiliados los trabajadores de la CEC, tome medidas que pueden poner en riesgo un proyecto tan importante y que en última instancia afectan seriamente la salud de miles de personas. Especialmente reprobable es que se haya impedido la entrada a la clínica a la Dra. Andrea González, Coordinadora del Programa de VIH/SIDA de la Ciudad de México, al Dr. Jesús Casillas, Director de la CEC; y al Dr. Ubaldo Ramos, Subdirector médico de dicha Clínica. Estas acciones son vergonzosas y contradictorias con la misión de los trabajadores del sector salud, especialmente para una Ciudad que hasta ahora ha dado ejemplos notables de avances hacia la protección social de grupos vulnerables.
Nos pronunciamos tajantemente en contra de estas acciones coercitivas e innecesarias que no sólo vulneran y ponen en riesgo seriamente la continuidad y los excelentes logros del programa integral de control del VIH/SIDA en la ciudad de México sino que, lo más grave, ponen en riesgo la salud y la vida de miles de pacientes con VIH atendidos por dicho Programa y finalmente a todos los habitantes de esta Metrópoli al afectar los programas de prevención en la lucha contra esta epidemia.
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